2/2/09

Cosas de domingos

Ni se le había ocurrido, hasta ese día, que podría llegar a pasar.
Había caído del cielo muy rápido y por poco lo logra
Sin embargo supo actuar a tiempo.

El pájaro Dominguero que sale a cazar los domingos a la tardecita
casi le arrebata su felicidad, pero ella, alcanzó a tapar su sonrisa.


3 comentarios:

Garibaldi dijo...

existen ciertas fragilidades que el tiempo hace recordar. no solo en la cacería o en el aterrizaje, o en la niñez y su fantasia.

cuando observo tus fotos...reconozco tu identidad, tu esencia.

Diego.

Anónimo dijo...

Guau, qué buen comentario Diego. Fuera de joda, es muy profundo y cierto. En cada foto-palabra de Darío, se repite él mil veces.

♫ En El Palacio De La Risa Y El Dolor ♪ ☆ dijo...

La primera vez que veo escritos sobre días domingos no tan depresivos ni llorones.. mis felicitaciones por ser distinto al resto..